miércoles, junio 10, 2009

FESTIVIDAD DE SANTA AGUEDA - 2000. TRES CANTOS

DÑA JOAQUINA CARBAJO, ALCALDESA HONORARIA


EN EL AÑO 2.000 OSTENTÓ EL NOMBRAMIENTO DE ALCALDESA HONORARIA DE LAS AGUEDAS, DE LA CASA DE CASTILLA Y LEON, DE TRES CANTOS, DÑA. JOAQUINA CARBAJO RODRIGUEZ, ZAMORANA.





BANDO DE “SANTA AGUEDA – 2000”
PRONUNCIADO POR
DÑA JOAQUINA CARBAJO RODRIGUEZ


Sr Alcalde, Sres. Concejales y demás Autoridades de este Ilmo. Ayuntamiento. Vecinas y vecinos de Tres Cantos. Amigas y amigos:

Desde principios del siglo once, se viene conmemorando la fiesta en Honor de Santa Águeda. Fiesta de gran tradición entre las mujeres castellano-leonesas por el prestigio que a ellas les confiere. Por ello, y como tal que soy, me siento privilegiada al poder en este año 2000. –engalanada a la usanza, como en tiempos ancestrales-, recibir de su Señoría el Bastón de Mando que me agracia, por un día, Regir la vida de este joven y laborioso municipio de TRES CANTOS, que, con ingenio y altura de mira, ha sabido acoger gente de múltiple procedencia y cultura y, así hoy, permitirnos expresar nuestro sentimiento popular.

Creo yo que el mejor balance de estos siglos ha sido la transformación social del papel de la mujer. Esto, además, se ha conseguido sin guerras, -con firmeza, tenacidad y sabiduría-. Por ello, aplaudo el esfuerzo realizado por todos los que han hecho esto posible. Pero en la actualidad, un eclipse lo nubla…

En estos últimos tiempos la mujer está sufriendo las conductas violentas de algunos hombres. Pido a todas las Instituciones que reaccionen con decisión para erradicar los malos tratos que, cotidianamente, reciben niñas y mujeres, y a que impulsen enérgicamente las medidas encaminadas para hacer real y efectiva la equiparación de derechos de la mujer.

Las mujeres debemos continuar en nuestro empeño de conseguir una sociedad más justa, donde nadie vea limitados sus derechos por el simple hecho de ser mujer. La igualdad de la mujer debe hacerse una realidad plena en todos los órdenes de nuestra vida social, por tanto, os convoco para responder al desafío y denunciar, con valentía, los actos anteriormente mencionados; y a ser defensoras perpetuas de los principios y libertades, demostrando así que existe una clara apuesta por la inquietud de la mujer en todo tipo de acontecimientos acorde con nuestro tiempo.

En esta atractiva ciudad se han hecho muchas cosas para mejorar la calidad de vida y la convivencia en la misma; pero aún hay otras muchas que faltan y que están en el ánimo de todos. Hasta mi, Alcaldesa por un día, me han llegado muchas peticiones en este sentido “La Biblioteca Pública” o “El Centro de Mayores en la 2ª Fase”, por poner algunas de entre las más demandadas. Paran hacer efectivo nuestro Buen Gobierno, hago extensiva esta petición al Ser Alcalde, -puesto que para él las funciones de Gobierno no concluyen con el día-, al tiempo que pido la colaboración de todos para así conseguirlas.

Por todo lo anterior, DISPONGO:

o TENER PASIÓN POR LA VIDA, por ser el regalo más maravilloso y mágico con que nos hemos encontrado.

o Y que sierva NUESTRO MEJOR TALANTE para portar, como si de andas se tratara, el COMPROMISO que de las Autoridades y Asistentes solicito.

DISFRUTEMOS PUES DE LA FESTIVIDAD DE SANTA ÁGUEDA con todos los elementos comunes que siempre han contenido, con el baile, con alegría… Y al igual que entonces las mujeres supieron colaborar en la conquista del Alcázar, hoy sirvamos de vehículo hacía nuevas vías de progreso.

Luchemos por conseguir el ÉXITO demostrando nuestra sensibilidad y capacidad, con expresión de alegría permanente; conquistando el respeto de las personas y el cariño de los niños; ganando el aprecio de los críticos honestos; soportando la traición de los falsos amigos; apreciando la belleza, encontrado lo mejor en los demás. En definitiva, dejando el mundo un poco mejor de lo que lo hayamos encontrado –ya sea por un niño sano, un jardín o una condición social redimida-, con la esperanza, cuanto no con la certeza, de que otras vidas respirarán más fácilmente porque hemos vivido.

¡Viva SANTA ÁGUEDA!